lunes, 30 de agosto de 2010

Hermano

Querido anecdiario,

Bien se dice que este mundo es un estudio de rodaje en el que todos somos actores. Rodamos millones de películas tituladas "Vida" en la que todos tenemos el papel de director y protagonista. A lo largo de nuestro rodaje, la película va cambiando inevitablemente de escenarios y de roles, dando diferente contexto y temática al film.

Alguien ha hecho que me de cuenta de que no solo somos protagonistas en nuestra propia película, sino que también lo somos en otras, involuntariamente, sin saberlo. No nos piden que lo seamos, simplemente nos dejan ser parte de algo que no nos pertenece, que engrandecerá una historia formando parte de otra. Es entonces cuando apreciamos la evolución de los personajes y nos perdemos en un argumento demasiado empalagoso como para ser explicado: la amistad.

Ahora puedo decir que he aprendido que una historia no es nada sin otra, que no puede haber un principal sin un secundario y que no hay nada como aportar una escena imborrable a una película.

Pero solo los grandes actores son los que consiguen una película en una sola escena, y eso mi querido amigo, es exactamente lo que has conseguido hacer con la mía.


Gracias amigo. Gracias hermano



jueves, 26 de agosto de 2010

Demonio

Querido anecdiario,

Esta misma tarde mientras volvía de hacer unos recados, me topé con un conductor un tanto alterado. Iba hablando por el móbil a grito pelao, con las ventanas delanteras hasta abajo, para que todos los transeúntes nos percatáramos de su conversación. Ignoro con quien debía estar hablando, aunque no es difícil imaginárselo escuchando la lindeza que ha soltado en uno de sus tantos berrinches:

"¡Como vuelva y lo pille allí te aseguro que la última cosa que habrá visto serán las tetas que te compré!"

A medida que se crecía en su monólogo, su color de piel ha ido cambiando, adquiriendo una tonalidad rojiza que ha evolucionado hasta el morado. La vena de su cuello parecía agonizar cada vez que alzaba la voz. Todos los que estábamos en la calle en ese momento, nos hemos parado a ver al hombre, atónitos ante tal espectáculo.

Justo antes que el semáforo donde estaba parado se pusiera verde, la persona con la que "hablaba" colgó. A lo que el hombre, en una explosión de rabia, se acercó el teléfono a la boca y soltó un enorme y desgarrado: "¡¡PUTAAAAAAAAAA!!" que hizo saltar a más de uno de los que estábamos allí. Seguidamente tiró el móvil por la ventanilla con tanta furia que alcanzó el cristal de una pastelería (cerrada por suerte).

Al verlo, ha pegado un acelerón brutal a su Audi y se ha marchado de la escena. Los que seguíamos ahí (unos riendo y otros aún asustados), hemos ido a ver el destrozo de la pastelería. A través del enorme agujero que había hecho, hemos visto el móvil en el suelo, que seguía funcionando y que al poco ha empezado a sonar con el "Sick of Love" de Robert Ramírez. Se podía vislumbrar una foto del hombre abrazando a una chica.


..Joder...

miércoles, 11 de agosto de 2010

Contra la ansiedad...

Querido anecdiario,

Hace una semana estaba en el coche parado en un semáforo cuando como quien no quiere la cosa, se me ocurrió mirar a la mujer del coche de al lado. Sujetaba algo entre sus manos, algo de un tamaño considerable y alargado, de un color morado a la par que transparente. No quería creerlo, pero sí, se trataba de un consolador.

La mujer lo iba chupando y lamiendo con total tranquilidad mientras se iba mirando por el retrovisor. No parecía que le afectasen demasiado las miradas furtivas de los demás conductores. En cuanto arrancamos la marcha, vi como seguía con su tarea mientras se alejaba por la calle contigua.

En fin, mi sorpresa ha sido mayor cuando esta mañana la he vuelto a ver, casi por la misma zona, con el mismo coche, las mismas gafas, el mismo peinado... Sólo el consolador parecía más grande, y es que, efectivamente,

Este, era negro.

viernes, 6 de agosto de 2010

Motes

Querido anecdiario,

Ayer por la noche estando en el trabajo ordenando los stocks de la tienda, vi (y escuché) a un hombre de que se comunicaba a gritos con otro que se encontraba en el otro extremo de la tienda. Cuando se encontraba a unos siete metros de mi, empezó a llamarme cómo si de su mascota se tratara. La conversación fue así:

- Oye tú, campeón...

- Buenas, dime, puedo ayudarte?

- Sí, oye mira, “tenís” la película esa que es una negra que comete un delito y salen monjas que la ayudan y cantan y todo eso?

Tras quedarme unos segundos pensando en lo que había dicho supuse que se refería a Sister Act, protagonizada por Whoopy Goldberg, a lo que él me contestó:

- No lo sé, ¿pero la “tenís”? Hace tres días se la “pidí” a una chica con una melena rubia mu’ guapa de aquí.

Tras oírle, consulté a ver si tenía la película pedida mientras pensaba a qué chica se refería (no hay ninguna chica rubia en mi departamento). Le dije que ya tenía hecha la reserva, pero que debía esperar hasta septiembre ya que la empresa no distribuye nada hasta entonces, por lo que se enfadó y se marchó de la tienda. A los diez minutos volvió y preguntó si en el punto de venta tenía micrófono para llamar a alguien, que no se habían dado cuenta que uno se había perdido. Le contesté que no y pregunté si se trataba de un niño, a lo que él me dijo:

- Sí, sólo que es más alto que yo y tiene “vintisiete” años.

Se me escapó la risa un instante y le mandé al punto de información. Al minuto volvió quejándose que allí no lo querían llamar, que se negaban rotundamente. Quise saber por qué y fui hasta allí con él preguntando el motivo. La chica me contestó:

- No podemos decir por micro que “EL AGORRINAO” se presente en información!


Benditos motes…

jueves, 5 de agosto de 2010

Presentación

Querido anecdiaro,

Ante todo, primero quería presentarme. Me llamo Javi, estoy estudiando un grado en psicología y trabajo temporalmente en un Media Markt. El motivo por el que he decidido empezarte es por la cantidad de dispares hechos que pasan a diario ante mis ojos.

En fin, creo que nos llevaremos bien.
Un saludo